Pero antes de entrar a analizar todo esto, vamos al principio: a la isla, a los personajes, a la historia, a la experiencia de juego que nos plantea Far Cry 3, así, de sopetón, según colocamos en disco del juego en nuestra videoconsola o PC. Pero voy avisando, Far Cry 3 es un juego muy, muy loco... y muy adictivo.
Rook Islands: Regreso al Lago Azul
Como ya sabéis por la cantidad de análisis y ríos de tinta que se han escrito sobre el argumento de Far Cry 3, la historia de este juego nos traslada a una isla paradisíaca del pacífico, un lugar de vacaciones y de relax que se transforma de repente en un infierno. Nosotros tomamos el papel de Jason, un joven y adinerado norteamericano que pasa unas idílicas vacaciones junto a su hermano y un grupo de amigos. Los excesos y la búsqueda de vivir emociones nuevas nos lleva a lanzarnos en paracaídas sobre una isla perdida que, al final, resulta no ser un 'resort' incluido en las rutas vacacionales. Todo el grupo cae en las manos de un grupo de piratas que nos toma prisioneros y, en principio, espera pedir rescate por nuestras cabezas a nuestros ricos progenitores en norteamérica.Y aquí aparece Vaas. El cabecilla de los piratas, con su característica melena mohicana, es un personaje fundamental del juego, una figura que condensa en su genial personalidad todo el espíritu de este frenético shooter. Vaas es un rebelde que está completamente loco, no sabemos si de manera congénita, 'poque el mundo le ha hecho así' como decía la canción o por la cantidad ingente de sustancias psicotrópicas que consume. Pero es un demente extremadamente violento que contagia de esa misma violencia loca al resto de habitantes de la isla.
Afortunadamente, conseguimos huir del campamento pirata (ante los ojos del propio Vaas, que jura aniquilarnos con sus propias manos) y nos adentramos en la selva. A partir de aquí nuestro objetivo principal es conseguir liberar a nuestros amigos, ponerlos a salvo y huir de esta infernal isla tropical. Como ya he dicho, todo esto ya se había dado a conocer en los múltiples avances, traílers e información hecha pública por Ubisoft. Y sólo con esta información sobre el argumento, que es la misma que tenemos tras jugar 10 minutos al juego, la verdad es que a un servidor el guión le parecía pobre, chusco, previsible y aburrido hasta la náusea. Pero es que esto sólo es el principio. Sin soltar ningún spoiler (me parecería un crimen hacerlo) os tengo que avanzar que la historia de Far Cry 3 es simplemente genial. Se va complicando a cada minuto y va creciendo como lo hace el mapa de la isla que tenemos ante las narices. Piratas, organizaciones criminales internacionales, nativos rebeldes luchando por su tierra y sus costumbres, decenas de personajes geniales que se cruzan en el argumento... En serio, el guión es muy grande y nada es lo que parece en un principio.
Como ya he dicho, sin lanzar spoilers innecesarios que fastidien vuestra sorpresa al enfrentaros a la historia del juego, lo que si contaré (ya se ha contado antes también) es que, enseguida, contaremos con la ayuda de los nativos de la isla. Estos pobladores sufren también la invasión de los piratas y se organizan para combatirlos y recuperar su ancestral tierra y sus costumbres. Así, para conseguir liberar a nuestros amigos, nos veremos indirectamente inmersos en una guerra, del lado de los nativos, que nos aceptarán como un guerrero más, lo que introduce el elemento sobrenatural y psicótico del juego del que ya os hablaremos. Bueno, lo psicótico lo añaden los indígenas y unas setas alucinógenas de muchos colores. Pero eso os dejamos que lo descubráis vosotros.
Una guerra abierta
Una vez en el lío nos damos cuenta de que tenemos ante nosotros una isla gigantesca (que en realidad son dos) en la que se nos abren varias decenas de misiones y actividades que podemos realizar en el orden que nos de la gana, con el objetivo final de conseguir liberar a nuestros amigos. Pero el camino será muy duro, muy largo y muy difícil. El juego es un 'sandbox' donde, como es habitual, se nos marcan las misiones principales que harán avanzar la historia principal si las superamos, pero donde, además, también surgen multitud de misiones secundarias y actividades de juego de todo tipo, que multiplican la duración del juego por una cifra que todavía no hemos sido capaces de calcular.
Nada más empezar a jugar tenemos que tener en cuenta que estamos ante una isla enorme de la que no sabemos nada de nada. De hecho, el mapa que tenemos de la isla (que les robamos a los piratas en nuestra huida) nos aparece borroso e incompleto. Por cierto, el mapa ya no es ese mapa GPS que usábamos en Far Cry 2 y que tanto mal hizo (bien bonito, pero poco funcional). Ahora pulsando un botón, 'como toda la vida de Dios', consultaremos el mapa mientras la acción se para. Aunque hay que decir que siempre aparece un minimapa en pantalla que nos ofrece información de dónde se encuentran los objetivos, sobre todo de cara a cuando estemos conduciendo un vehículo.
El caso es que para hacer menos borroso ese mapa tenemos que ir activando una serie de viejas y abandonadas torres de radio (muy al estilo de las atalayas de Assassin's Creed). Cada vez que conseguimos activar una, se muestra una sección de nuestro mapa y se nos muestra la ubicación de un montón de misiones, actividades, juegos y lugares de interés. Además, al activar una de estas torres, ayudamos a los lugareños a reactivar sus comunicaciones, lo que les permite recibir suministros, lo que nos permite a su vez a nosotros encontrar en las tiendas de los pueblos nuevos artículos (sobre todo armas y municiones) para comprar. Y no solo comprar, también adquirir completamente gratis algunas armas, ya que así nos agradecen los oriundos que les activemos las torrecitas de marras. Por lo tanto el activar las torres es una de nuestras preocupaciones principales. En las dos islas del juego hay un total de 18 torres, pero ya os digo que conseguir activarlas no es nada fácil.
Pero, además de ocuparnos de saber a dónde dirigirnos aclarando el mapa, otro asunto del que tenemos que ocuparnos inmediatamente es de nuestra capacidad real de enfrentarnos a cientos de piratas armados hasta los dientes. Hay que tener en cuenta que, al principio del juego, somos un pringado jovencito acomodado de Estados Unidos sin armas ni ninguna habilidad especial que nos permita sobrevivir en medio de la jungla y mucho menos enfrentarnos a asesinos sin escrúpulos. Y para que Jason se convierta en un héroe necesita varias cosas: lo primero aliados, lo segundo armas y juguetes varios y, por último, aprender habilidades para convertirse en un guerrero letal.
Los aliados llegarán solos: los rakyat son el pueblo indígena que vive en la isla desde hace siglos y que están librando una guerra abierta contra los piratas. Como compartimos enemigo, ellos nos acogen como uno de ellos y nos tratarán como un guerrero. Cuando estemos en pueblos controlados por ellos estaremos en zona neutral, podremos adquirir armas y materiales en sus tiendas, etc. Además, podemos tomar por la fuerza los Puestos piratas que se encuentran repartidos por las islas. Una vez tomados (hay que eliminar a todos los piratas que haya en ellos), un grupo de rakyats tomará el puesto y se convertirá en una zona nuestra. Una zona que incluye una guarida donde obtener provisiones y resguardarnos cuando lo necesitemos. Además se convierten en un punto de viaje rápido al que llegar inmediatamente.
Para hacernos con armas, municiones y demás materiales necesarios para nuestra guerra, tendremos que acudir a las tiendas de los rakyats, a las guaridas de los puestos, a las tiendas de los pueblos de la isla, etc. Cada vez que avancemos en el juego habrá más armas disponibles (hasta un total de 39 distintas), además de decenas de artefactos para personalizarlas y mejorarlas. Para comprar las armas, la munición y todo lo demás utilizaremos las monedas que conseguimos recolectando botín por toda la isla, de los enemigos muertos, etc. Podemos vender y comerciar con todo tipo de mercancías para hacer dinero. Pero para llevar dinero necesitamos una o varias carteras, para llevar varias armas a la vez necesitamos cartucheras y para llevar más materiales necesitamos una o varias mochilas. Y para tener todo esto, tendremos que fabricar todos esos objetos. Luego os contamos cómo.
Por último, para conseguir convertirnos en un guerrero letal, en un héroe de acción, tenemos que adquirir las habilidades del guerrero. Aquí el juego tiene un sistema de habilidades muy similar a un juego de rol. Dennis, nuestro amigo de los rakyat, nos introduce en la senda del guerrero, comienza a tatuarnos un 'tatau' sagrado en el brazo y nos enseña cómo adquirir esas habilidades propias de los grandes guerreros de su tribu. En el juego vamos adquiriendo experiencia por todos los logros que alcancemos (eliminar enemigos, completar misiones, recoger mercancía, encontrar objetos, etc.) y esa experiencia se va traduciendo en puntos de habilidad, que tendremos que repartir en un árbol de habilidades bastante complejo.
Tatuajes, jeringuillas y jornadas de caza
Ese árbol de habilidades que os contamos se divide en tres: la garza, el tiburón y la araña. En cada uno de ellos podemos ir aprendiendo las habilidades que queramos a nuestra elección. Las habilidades nos otorgan ventajas de todo tipo: desde nuevas formas de eliminar a los enemigos hasta mejores niveles de recuperación de salud, menor daño recibido, mejoras a la hora de crear objetos, etc. Cada vez que vayamos aprendiendo habilidades irá creciendo el tatuaje de nuestro brazo, convirtiéndonos en un guerrero mucho más poderoso.Pero la experiencia y el árbol de habilidades no son el único elemento rolero que introduce Far Cry 3, ya que también es muy importante el crafting y la creación de objetos para nuestro inventario. Como os hemos contado es necesario crear las mochilas, carteras y cartucheras para poder llevar con nosotros más dinero, más armas, más munición y, en general, más material que nos sirva de ayuda. Pero para poder construir esto necesitamos pieles de animales y para obtenerlas no nos queda otra que ponernos a cazar. Esto implica que tendremos que buscarlos y cazarlos, para luego degollarlos y quitarles la piel. Esta actividad, que es imprescindible, nos llevará bastante tiempo y, a veces, es algo desesperante. ¡Me tiré una hora intentando encontrar cabras para arrancarles su piel y hacerme un carcaj de flechas!
Otro elemento que podemos fabricar son las jeringuillas. Para ello es obligatorio encontrar plantas y hierbas muy concretas y luego fabricar nuestras dosis. Las jeringuillas nos proporcionan salud y más cosas: mejoras en nuestra puntería, en nuestra habilidad para la caza y muchos beneficios más.
Misiones secundarias que no lo son tanto
Pero no te preocupes, esto no es un juego de rol aunque comparta estos elementos. Far Cry 3 es un shooter frenético y muy loco, pero nos obliga a ocuparnos de todas estas actividades para mejorar nuestra disposición en el combate. Y esto es imprescindible, porque las misiones se van complicando cosa fina.La campaña de Far Cry 3 es inmensamente larga. El juego cuenta con 40 misiones principales (mas 3 importantes misiones opcionales) y luego un sinfín de misiones secundarias, actividades y minijuegos. Y ya hemos dicho que las misiones secundarias,en muchísimos casos, no lo son tanto, ya que no nos queda otra que superarlas para que las misiones principales se hagan más llevaderas. Tomar puestos de piratas es fundamental para hacernos con el control de la isla y del juego. Ten en cuenta que hay un total de 34 puestos entre las dos islas.
Además de los puestos de piratas, hay decenas de misiones secundarias que se abren en cada sección de mapa cuando activamos la torre de radio correspondiente. Entre ellas destacan las misiones de caza, las reliquias y tesoros escondidos (hay una burrada), los retos de los rakyats (son retos geniales de eliminación y demás que nos recompensan con mucha experiencia), los 'se busca muerto' (hay que matar a alguien por dinero), las carreras de suministros (carreras de velocidad muy locas en las que hay que conseguir entregar suministros médicos a los nativos en un tiempo máximo), etc. Todas estas misiones no son tan optativas, ya que el dinero, la experiencia y el material que nos aportan son fundamentales para avanzar más comodamente en la historia.
Además de todo esto, también hay un montón de minujuegos repartidos por las islas como las timbas de póker, las carreras de velocidad en las que podemos apostar mucha pasta, juegos de puntería, de caza... Vamos, que no nos aburrimos y son un método genial de conseguir dinero.
Así, teniendo todo esto en cuenta, puedes imaginar la duración de Far Cry 3. Nosotros, en serio, después de haber echado un ingente número de horas, todavía no nos atrevemos a ponerle un número definitivo de horas de duración. Y todo mientras disfrutamos de un shooter genial, con escaramuzas y batallas cada cinco minutos (sin necesidad de avanzar nada en la historia principal del juego). Y todo mezclado con la posibilidad de conducir todo tipo de vehículos por tierra, mar y aire: coches, motos, motos acuáticas, barcos de todo pelaje, avionetas, ala deltas... Podemos utilizar todos estos vehículos para movernos por las enormes islas o utilizar los 'saltos rápidos' entre guaridas y lugares importantes solo pulsando su icono en el mapa.
Apartado técnico a la altura
En cuanto a los aspectos técnicos del juego tenemos que decir que están a la altura de las expectativas. La IA de los enemigos nos ha resultado tremendamente efectiva. Los piratas son demasiado listos y, como ya hemos dicho, muy violentos y muy locos. Lo primero que hay que tener en cuenta es que nos cazarán a la mínima si no somos precavidos. El juego tiene mucho de sigilo, ya que somos una persona frente a ejércitos de piratas y solo esliminando objetivos de uno a uno y sin hacer ruido tendremos alguna posibilidad.Los piratas realizan patrullas y observan constantemente el entorno para buscar rebeldes y, si nos detectan, unos cuantos irán a por nosotros gritando y no pararán hasta aniquilarnos (a través de la jungla si hace falta), mientras otros se preocupan de mantener la posición y de activar las alarmas para llamar a los refuerzos (por eso es fundamental desactivarlas cuando nos sea posible). Por eso tenemos que intentar ocultarnos todo el rato (el juego nos muestra un indicador en pantalla que nos avisa si nos están percibiendo) y acercarnos con sigilo. También tenemos la opción de lanzar una piedra para llamar la atención de los enemigos a otra parte. Todo se basa en debilitarlos y luego caer con todas nuestras armas sobre ellos.
En cuanto al apartado gráfico, hay que decir que es sobresaliente, pero que si que nos hemos encontrado con algunas texturas bastante pobres en muchas ocasiones. Pero, en general, se trataban de elementos secundarios y, tal vez, en un juego tan ingente como este, se pueda llegar a perdonar. No todo puede ser tan bonito cuando hay que mover mapas de cientos de kilómetros cuadrados. También el 'poping' aparece con frecuencia, haciendo aparecer vegetación o estructuras a lo lejos. Pero, en general, gráficamente es una maravilla, sobre todo por la variedad de entornos, la luz de la isla (que va cambiando según el día), los efectos meteorológicos...
En cuanto al audio, hay que decir que está sumamente cuidado, con un doblaje al castellano extraordinario y una banda sonora propia de una película de acción de gran presupuesto.
Modos multijugador
Además de la campaña, el juego cuenta con un completísimo modo multijugador, que también hemos podido probar y hemos disfrutado como enanos.Especial mención hay que hacer al modo cooperativo del juego. Los desarrolladores decidieron crear una campaña especial, con nuevos personajes y nuevo argumento, para el modo cooperativo. En esta campaña hay cuatro personajes geniales (se puede jugar con hasta cuatro jugadores), todos ellos tripulantes de un barco atacado por los piratas cerca de Rook Islands. El propio capitán del barco es el que les ha vendido para llevarse un tesoro enorme, a medias, con los piratas. Los cuatro personajes salvan la vida y acaban en la isla y su objetivo a partir de aquí es encontrar al capitán, hacerle pedazos muy pequeños y quedarse con el botín. La campaña cuenta con seis grandes capítulos geniales para disfrutar con amigos.
En cuanto a los modos competitivos, también están muy bien trabajados y cuentan con cuatro modalidades: un todos contra todos, el modo dominación (por equipos, en el que hay que ir capturando puestos y mantenerlos durante el mayor tiempo posible en una cuenta atrás); el modo transmisión (hay que controlar las emisoras de propaganda del mapa y mantenerlas hasta que se desactiven) y el modo tormenta de fuego (hay que prender fuego a los puestos de suministros enemigos, a la vez). En ellos, además del armamento presente en el juego, tenemos a nuestra disposición armas masivas especiales, como bombas aerotransportadas o gases venenosos. Hay un gas que confunde al contrario y no distingue entre amigos o enemigos, por lo que puede terminar disparando a sus compañeros.
Los modos por equipos son especialmente entretenidos y en ellos tenemos la opción de salvar (revivir) a nuestros compañeros durante un tiempo (también está presente en el modo cooperativo, claro está). En todos los modos multijugador (cooperativo y competitivos) utilizaremos el mismo perfil de juego, con todas nuestras mejoras, configuraciones de armas, habilidades, experiencia obtenida, trofeos, etc. Y también las 'decisiones finales', estas decisiones finales marcan cómo vamos a acabar con el equipo enemigo derrotado. Cada una de ellas, son desbloqueables y las obtendremos sumando habilidad en el multijugador, es más humillante que la anterior.
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